La industria del diamante presenta unas buenas cifras en todos los segmentos en cuanto al año pasado y se posiciona bastante bien de cara al futuro.

En cuanto a la pandemia, la industria invirtió en nuevas tecnologías para poder acelerar y hacer más efectiva la compra electrónica y las nuevas experiencias de marketing.

La demanda en 2021 fue bastante alta, sobre todo a partir del segundo semestre, esto supuso el alza de los precios y los márgenes de beneficio a lo largo de la cadena de valor. Según iban creciendo las ventas de diamantes en bruto, los mineros aumentaron el volumen de producción. La saludable demanda y la recuperación de los precios de los diamantes pulidos ayudaron a la mediana empresa a lograr márgenes altos en una década.

Además, el mercado de joyas de diamantes mostró un crecimiento de +29% el año pasado, la cifra más alta de la década.

AWDC y Bain & Company esperan que el mercado de joyas de diamantes para la primera mitad de 2022 sea sólido, junto con el crecimiento en todos sus segmentos. En cuanto a la recuperación, se espera que las ventas sigan floreciendo, junto con una fuerte demanda y un crecimiento continuo.

El escenario de reajuste a corto plazo prevé una posible corrección leve en la demanda de joyas de diamantes a partir de fines de 2022 y principios de 2023, con un regreso gradual a los niveles de tendencia anteriores a la pandemia y tasas de crecimiento en 2024.