El rubí es una de las piedras de color más históricamente significativas. Los rubíes se mencionan cuatro veces en la Biblia, en asociación con atributos como la belleza y la sabiduría.

En el idioma antiguo del sánscrito, el rubí se llama ratnaraj, o "rey de las piedras preciosas". Las primeras culturas atesoraban los rubíes por su similitud con el enrojecimiento de la sangre que fluía por sus venas, y creían que los rubíes tenían el poder de la vida.

En el siglo I d. C., el erudito romano Plinio incluyó rubíes en su Historia Natural, describiendo su dureza y densidad. Los antiguos hindúes creían que a los que ofrecían rubíes finos al dios Krishna se les otorgó el renacimiento como emperadores.

Los hindúes dividieron el rubí en cuatro castas, llamando al verdadero rubí oriental un brahmán. Se creía que alguien en posesión de un brahmán tenía la ventaja de una seguridad perfecta.

En Birmania (una fuente de rubíes desde al menos 600 dC, ahora llamada Myanmar), los guerreros poseían rubíes para hacerlos invencibles en la batalla. Sin embargo, no fue suficiente con usar los rubíes. Tuvieron que insertarlos en su carne y hacerlos parte de sus cuerpos.

Estos son los principales yacimientos de rubíes:

  • Birmania
  • Thailandia
  • Sri Lanka
  • Kenia – Tanzania

El nombre rubí proviene de la palabra latina ruber, que significa "rojo". El rojo brillante del rubí sugería una llama inextinguible que ardía en la piedra, incluso brillaba a través de la ropa y podría hervir en el agua.

Esta bella piedra preciosa conservó su importancia con el nacimiento del mundo occidental y se convirtió en una de las gemas más buscadas de la realeza europea y las clases altas. Muchos europeos medievales usaban rubíes para garantizar la salud, la riqueza, la sabiduría y el éxito en el amor.

Lista de los rubíes más valiosos y famosos

  1. The Liberty Bell Ruby
  2. El Príncipe de Birmania
  3. The Sunrise Ruby
  4. El Rosser Reeves Ruby
  5. El Neelanjali Ruby
  6. The Midnight Star Ruby
  7. El DeLong Star Ruby

El precio de un rubí varía ampliamente y está determinado por numerosos factores como el color, la claridad, el peso en quilates, etc.